Algunos riesgos laborales producto de actividades y condiciones laborales no son susceptibles de ser observadas o medidas sino de otros factores como grado de exposición; en estos casos hay que recurrir a los métodos especializados de análisis. En resumen, podríamos mencionar de manera superficial los más comunes:
Método LEST – evaluación de condiciones de trabajo: Es usado para evaluarlas condiciones de un puesto de trabajo para puestos fijos. Utiliza una guía de evaluación de las tareas, usando pregunta a modo de indicadores en 16 variables agrupadas en entorno físico, carga física, carga mental, aspectos psicosociales y tiempo de trabajo, con escala de valoración del 0 al 10.
Método de perfiles de los puestos: Cuantifica las variables que definen las condiciones de un puesto de trabajo: seguridad, entorno físico, carga física, carga mental, autonomía, relaciones, repetitividad y contenido del trabajo. Es muy utilizado para evaluar puestos de trabajo en cadenas de montaje y trabajos repetitivos de ciclo corto.
Índice WBGT – Valoración del riesgo por estrés térmico: mide el calor (temperatura) en un ambiente laboral y que puede causar estrés, incomodidad, bajo rendimiento y cualquier daño a la salud. Las mediciones se realizan sobre la altura de los tobillos, abdomen y cabeza.
Árbol de fallas y errores: se aplica fundamentalmente a un acontecimiento final (accidente) y se analiza el camino del evento hacia atrás, hasta poder visualizar su origen o causa (método deductivo de análisis).
Ecuación NIOSH – Levantamiento manual de cargas: permite calcular el peso máximo recomendado en la manipulación manual de cargas para conocer el peso que un trabajador puede levantar sin riesgo.
Método probit: es un modelo estadístico de vulnerabilidad de trabajadores a accidentes graves.